Elena Logroño
Trata de un niño paquistaní, que debido a su situación económica se tiene que esclavizar, es decir, que tiene que trabajar jornadas enteras desde primera hora de la mañana hasta la noche sin apenas descansar.
Es algo inhumano, aparte de eso su ``dueño’’ cuando no hacen algo bien o se equivocan les agrade y golpea. No sabía leer, ni escribir ni nada, y un día, vió un cartel que ponía que iban a hacer una charla sobre niños esclavizados como él y muchos más niños que sufrían así. Desde aquella charla se llenó de coraje y tras un día levantarse harto de su rutina se dijo así mismo que nunca iba a estar más de esa manera y que iba a hacer lo que fuera para que no pasara más.
Tras informarse e ir a muchas oficinas y organizaciones para que le pudieran ayudar a dejar de estar esclavizado, a él y a los demás niños. Fue, por decirlo de alguna manera el defensor de los niños esclavizados.
Viajó a muchas conferencias para informar a más gente y que se extendiera el problema de la esclavitud infantil. Llegó a muchos oídos y se hizo escuchar gracias a que era una persona que hacía sentir a la gente lo que le había pasado (o al menos a mí me trasmitía eso). Al paso de unos meses se oían noticias por todos lados. También consiguió ir a la escuela aprender a leer, escribir… A su profesor le gustaba ese chico le veía con ganas y bastante interés por aquello que luchaba.
Consiguió muchas cosas con su revolución por llamarlo de algún modo, ya que hizo que los niños esclavos tuvieran una razón para levantarse por las mañanas y sonreír.
Fue el héroe de niños y adultos y tenía mucha personalidad, mucho coraje, y muchas cosas que no se pueden describir.
OPINION
Es muy chocante tener que escuchar esto de un niño. Es normal que se queje, que se intente informar y muchas cosas pero ha llegado muy alto para ser un niño de su edad… Es un libro genial y es una pena que siga habiendo casos como este es un buen modelo a seguir.
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