martes, 14 de febrero de 2012

EL SECRETO DEL HOMBRE MUERTO de Joan Manuel Gisbert




Anass Houiyat

La historia se narra en Venecia. Luca, es el protagonista, un muchacho que estaba desesperado. Su madrastra lo había echado de casa con la excusa de que no había suficiente comida para toda la familia. Sabía que lo de la comida era mentira , lo que quería era apoderarse de las posesiones de su padre, un hombre ya mayor y débil de carácter. Ágata dejó a Luca en una plaza y le dijo que insistiendo conseguiría trabajo de lo que fuera. Ágata le dijo que volvería en dos semanas a la misma plaza para que él le contara como le fue. Luca se encontraba solo por todas esas calles perdido. Tocaba de puerta en puerta hasta que un hombre, bien entrada la tarde le dio comida y le dijo que si alguna vez se encontraba en un apuro grave, que se lo fuera a decir. Salió de la casa muy agradecido y siguió buscando. Ya de noche una mujer le preguntó qué hacía, si estaba solo… Luca contestó que sí y le dijo que estaba buscando trabajo como ayudante de criados, ella le dijo que eso era muy difícil pero que podría pasar la noche donde ella cuida a un hombre.Cuando ya se veía el palazzo en el piso de arriba se veía una pésima luz. Luca aún estaba más inquieto. Entraron por la puerta grande y la mujer cerró por dentro para que no entrara nadie. La mujer le prohibió subir al piso de arriba y por la ausencia de muebles, le dijo que durmiera encima de unos sacos. Luca se sorprendió con el sonido del agua corriendo. Poco a poco Luca se durmió en aquellos sacos húmedos; mientras dormía tuvo una pesadilla: se veía a él con un hombre fuera del palazzo. El hombre arrojó en el agua rosas negras y de pronto salieron serpientes del agua. Oyó un susurró que le hablaba, era el hombre de las rosas. Le decía que no sabía quien era, ni porqué estaba allí, le hablaba desde un sueño, era la manera de estar más cerca de él. Le dijo tenía que hacer algo antes de que llegara el fin, para solucionar la situación en la que estaba. Luca se despertó, tenía miedo,no hacía más que darle vueltas; hasta pensó en subir al piso de arriba y tirarse desde una ventana. Cuando volvió a los sacos la mujer bajó corriendo y le dijo que había ocurrido algo, que tenía que irse y que el se quedara en palazza esperándola por si pasaba algo, si veía a alguien rondando la casa que se quedara con la cara y después se lo dijese a ella, pero que no le abriera. Él lo que quería era huir cuando ella abriera la puerta, pero ella bajó al sótano y ya no volvió; se asomó y vió un estrecho canal por donde se había ido.
Me ha gustado mucho, es entretenido y tiene un final feliz

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